José Carlos Bermejo, delegado General de los Religiosos Camilos de la Provincia Española ha participado y apoya la propuesta de cambio para la definición de la compasión.
La cultura de la humanización que promovemos desde el carisma camilianopromueve un cuidado compasivo de la persona que sufre. Tomando como referente la parábola del buen samaritano del evangelio de Lucas hemos ido tiñendo de un nuevo sentido la palabra compasión. El núcleo del carácter compasivo se basa en la capacidad para reconocer el sufrimiento del otro y el compromiso con el que sufre para aliviarlo. Tradicionalmente el término ha estado ligado a una toma de conciencia del sufrimiento desde la lástima y la diferencia de poder entre el que sufre y el que es movido a ayudar.
Desde el Centro San Camilo se lleva adelante el programa de acompañamiento compasivo de las personas con demencia avanzada. Se centra en el contacto con el enfermo y el cultivo de una presencia comprometida y horizontal que conecta con la persona. Este y otros muchos ejemplos en los que la referencia a la compasión nada tiene que ver con la pena o la lástima.
Por ello; apoyamos esta propuesta de cambio. Somos conscientes de la importancia del lenguaje en la cultura y la bondad de esta evolución que nos ayuda a humanizar el cuidado.