El Papa Francisco recuerda a San Camilo

Un saludo cálido y lleno de afecto: Con estas palabras se ha dirigido el Santo Padre, en la mañana del pasado domingo 13 de julio, a la Gran familia de San Camilo reunida en la Plaza de San Pedro para participar en el rezo del Angelus.

Al final de la habitual oración mariana, el Papa Francisco se dirigió a los allí presentes: "Saludo con afecto a todos los hijos e hijas espirituales de San Camilo de Lelis, que mañana celebra el 400 aniversario de su muerte. Invito a la Familia Camiliana, en este momento del año jubilar, a ser una señal del Señor Jesús que, como el Buen Samaritano, se inclina sobre las heridas del cuerpo y del espíritu de la humanidad sufriente, a verter el aceite del consuelo y el vino de la esperanza. A los profesionales de la salud que prestan servicios en los hospitales y hogares de ancianos presentes en esta Plaza de San Pedro, os animo a crecer más y más en el carisma de la caridad, alimentado por el contacto diario con los enfermos. Y por favor, no os olvidéis de rezar por mí. "

Desde el inicio de la mañana, un numeroso grupo de representantes de la Orden de los Ministros de los Enfermos (Religiosos Camilos), de las congregaciones femeninas de las Hijas de San Camilo y de las Ministras de los Enfermos, miembros de Familia Camiliana Laica que se había reunido en la Plaza de San Pedro desafiando las predicciones de mal tiempo. También estuvieron presentes el recién elegido Superior General de la Orden padre Leocir Pessini y los miembros de la Consulta General. Con el trasfondo de alegres canciones dedicadas a San Camilo, se distribuyó material informativo entre los asistentes del "gigante de la caridad". Dos grandes pancartas con la inscripción: "400 años de San Camilo", gorras, bufandas, banderas y sombrillas de colores completaban una coreografía, claramente visible desde arriba y que las cámaras de televisión enfocaron en varias ocasiones.

El saludo final al Papa Francisco fue el broche final a un día maravilloso, en la víspera del aniversario jubilar de San Camilo, que ascendió al cielo, hace exactamente 400 años.